No es la primera vez que nos encontramos con que algunos de tus antepasados, tanto por línea materna como paterna, o ambas a la vez, hayan nacido o provengan de algún país cercano o lejano al lugar donde tú has nacido y te has criado. En la mayoría de los casos, es una muy grata sorpresa, y en otros muchos, la sorpresa es mayúscula, ya que nunca se hubieran imaginado que alguno de sus ancestros viniera de países, en algunos casos, inesperados por el contraste cultural y étnico, ya que nunca lo hubieran podido imaginar. Sin embargo, eso nos enriquece mucho más como personas y te acercará a una cultura de la cual tienes una parte de esa carga genética única en tus genes.

En lo referente a la tramitación de documentación y acceso a la misma, cuando alguno de tus antepasados se encuentra registrado su nacimiento en el extranjero, se dificulta y ralentiza mucho más el trabajo en esa línea familiar concreta, ya que los procesos burocráticos y administrativos de cada país son muy diferentes a los de España, lo que complica recibir la información requerida en los diferentes registros civiles o eclesiásticos extranjeros. Llegados a ese punto en concreto, si eso fuera así, te lo indicaríamos, evaluando si es factible continuar en esa línea en concreto, dejando vacía, de momento, esa rama, ya que los costos en tiempo y trabajo serían importantes. Y tendríamos que evaluarlo por ambas partes. En el caso de que las autoridades competentes de ese país nos facilitaran la documentación requerida, te la haríamos llegar para que en este caso rellenaras la autorización requerida con tu consentimiento para acreditar que eres un familiar cercano o lejano de ese ancestro en particular.

Cuando nos encontramos con casos en los que es imposible obtener esa información de algún antepasado, no es óbice para que el resto de tu árbol genealógico no se complete, ya que la ramificación del mismo es muy amplia y vasta.