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" El futuro de la astrología se

 encuentra situado en los ciclos planetarios,

 no en los signos del Zodíaco"

Noviembre 2024   Edición nº: 29


OTAN

Carlos Morales | Barcelona | 26.02.2022 | 09:32 hrs. 

Análisis astrológico: 

Organización del

Tratado del Atlántico Norte

OTAN, NATO, Alianza Atlántica

La OTAN se fundó en Washington el 4 de abril de 1949. Actualmente, la integran 31 países y su sede está en Bruselas. La organización se creó con el fin de establecer un sistema de defensa colectivo, en el cual los Estados integrantes acordaron defender a cualquiera de sus miembros que fuera atacado por una potencia externa. Desde su fundación, la OTAN ha evolucionado para abordar nuevos desafíos de seguridad global, como el ciberterrorismo y las amenazas híbridas. Además de su función defensiva, la alianza también ha trabajado en misiones humanitarias y de mantenimiento de la paz en diversas regiones del mundo. A lo largo de los años, ha demostrado su compromiso con la promoción de los valores democráticos y los derechos humanos, manteniéndose como un pilar clave en la seguridad y estabilidad internacional.


La génesis de la OTAN se encuentra en el clima geopolítico de la posguerra, marcado por la creciente tensión entre las potencias aliadas occidentales y la Unión Soviética. La Guerra Fría emergió como un enfrentamiento ideológico y político entre el bloque occidental, liderado por Estados Unidos, y el bloque oriental, también conocido como el bloque de Europa del Este, que estaba bajo el paraguas de la Unión Soviética. El miedo a la expansión del comunismo y la amenaza de una guerra nuclear llevaron a la creación de un pacto defensivo que asegurara la estabilidad entre los aliados. Sin embargo, una vez desintegrada la URSS en 1991, la OTAN no se disolvió, sino que siguió operativa.


El Tratado del Atlántico Norte, firmado en Washington D. C. en 1949, estableció a la OTAN como una alianza militar con el compromiso de que un ataque contra uno o varios de sus miembros sería considerado un ataque contra todos. Este principio de defensa colectiva proporcionó una garantía de seguridad a los países miembros y se convirtió en el pilar fundamental de la organización.


Los doce países fundadores de la OTAN fueron Bélgica, Canadá, Dinamarca, Francia, Islandia, Italia, Luxemburgo, los Países Bajos, Noruega, Portugal, el Reino Unido y los Estados Unidos. Este grupo inicial compartía una visión común de la democracia y la economía de mercado, fundamentos que fortalecieron su cohesión.


En la década de los años 50 del siglo XX, se creó el Pacto de Varsovia, una organización de defensa militar establecida por la URSS en 1955 en respuesta a la OTAN, como frente de choque para repeler un posible ataque por parte de Europa Occidental, liderada por los Estados Unidos. Eso alentó a la OTAN a seguir desempeñando un papel fundamental en la estrategia de contención hacia la Unión Soviética, manteniendo una presencia militar significativa en Europa Occidental y llevando a cabo maniobras y ejercicios para disuadir posibles agresiones. La construcción del Muro de Berlín en 1961 y la crisis de los misiles en Cuba en 1962 fueron momentos críticos que pusieron a prueba la solidez de la alianza.


A pesar de las tensiones, la OTAN también buscó canales de diálogo con la Unión Soviética y sus países satélites, a través de reuniones y acuerdos destinados a reducir la posibilidad de un conflicto directo. Este enfoque contribuyó a la estabilidad en el continente europeo.


Con el colapso del bloque soviético y el fin de la Guerra Fría en la década de 1990, la OTAN se embarcó en un proceso de adaptación para enfrentar nuevos desafíos. Varios años después de la caída del Muro de Berlín en 1989, aprovechando el debilitamiento económico y político de Rusia, país heredero de la desaparecida Unión Soviética, la organización intervino en la guerra de Yugoslavia, lo que se convirtió en la primera acción militar conjunta de la OTAN sin el consentimiento de la ONU.


En esos años, la Alianza Atlántica mejoró sus relaciones con los antiguos países del bloque del Este, dando como resultado la incorporación de varios miembros que actualmente forman parte de la OTAN y que en el pasado eran parte estratégica del bloque comunista. Dicha integración se realizó con aquellos Estados que compartieran los valores democráticos y el compromiso con la paz y la seguridad europea y mundial.


En los años siguientes, la OTAN se involucró en operaciones de mantenimiento de la paz y de respuesta a crisis en los Balcanes, y más tarde en Afganistán. Estos compromisos redefinieron el papel de la organización en un mundo post-Guerra Fría, marcado por nuevas amenazas más difusas y asimétricas.

OTAN, NATO, Alianza Atlántica

Si nos centramos en el análisis astrológico del gráfico natal de la OTAN, vemos dos importantes configuraciones planetarias: una estrecha conjunción entre el Sol, Venus y Marte, y una tensa figura de aspectos que involucra también al astro rey, con una oposición entre el Sol y Neptuno. Este aspecto tiene dos claras connotaciones: la primera es la búsqueda de seguridad ante la inseguridad, y la otra es la incertidumbre de creer que el eterno enemigo tiene un modelo estratégico de defensa militar superior al propio.


Por una parte, esta oposición está flanqueada por la intervención de Saturno, con una sexquicuadratura al Sol y una semicuadratura a Neptuno, lo que refuerza la necesidad de establecer todos los mecanismos de seguridad y protección para todos sus miembros, ya que desconfían de todo lo que no entre en su zona de influencia. Esta incertidumbre interna es lo que hace que no se disuelva, una vez cae el Telón de Acero, por el hecho de que sigue desconfiando del principal país heredero de la Unión Soviética: Rusia. A eso hay que añadir una nueva y emergente potencia militar: China. De ahí su expansión comedida pero constante hacia los países del Este, impulsada por Estados Unidos.


Otro factor importante es el destacado ciclo planetario Júpiter-Saturno, donde ambos planetas forman un quincuncio. Este aspecto y sus dos principales actores destacan por la capacidad de organización y coordinación que le permite sopesar cualquier situación de extrema tensión antes de tomar decisiones a nivel táctico y de seguridad. Por ese motivo, ha titubeado en incorporar a Ucrania dentro de la alianza, ya que en los últimos años el presidente de Rusia, Vladimir Putin, ha manifestado en reiteradas ocasiones su disconformidad con la OTAN por la ampliación de nuevos Estados a la organización, entre ellos las repúblicas bálticas de Estonia, Letonia y Lituania en 2004, junto a su frontera, considerando amenazada su seguridad nacional. Es más, el acercamiento por parte del presidente de Ucrania a la Unión Europea, junto con la solicitud de incorporación de su país a la Alianza Atlántica, ha provocado, entre otros muchos intereses del gobierno ruso, la invasión de Ucrania el 24 de febrero de 2022.


Otro factor astrológico de suma importancia es la presencia reactiva e impulsiva de la conjunción entre el Sol, Venus y Marte. Esta configuración puede activarse sin miramientos por parte de la alianza, ya que Venus y Marte escapan a la contención que ejerce Saturno sobre la oposición Sol-Neptuno. Además, Marte tiene un quintil con Júpiter, que le insta a expandir su esfera de influencia militar, como ya hemos visto. Este ciclo planetario ha estado presente en los principales y más importantes conflictos bélicos de la historia, junto al ciclo planetario Venus-Marte.


La OTAN sigue siendo una alianza vital para la seguridad global, y sus miembros continúan comprometidos con la defensa colectiva y la promoción de la estabilidad. El futuro de la organización dependerá de su capacidad para adaptarse a los desafíos cambiantes del panorama internacional y para mantener la cohesión entre sus miembros en un mundo cada vez más complejo. Esperemos que la cordura y contención de Saturno sigan presentes dentro de la Organización del Tratado del Atlántico Norte.

Notas del autor:

  1. Todos los artículos de investigación que se encuentran en esta web del Proyecto Ciklus, donde se investiga y analiza astrológicamente una determinada temática o materia de estudio (por ejemplo: las crisis económicas, guerras, pandemias, etc.), detallan y exponen solamente los ciclos planetarios que, de manera repetitiva, dan muestras inequívocas de estar estrechamente relacionados con la temática o materia del estudio que se investiga. Esto se debe a un principio fundamental: no podemos obviar un determinado ciclo planetario que aparece de manera reiterativa si se aprecian dichas evidencias en los casos que tienen un denominador común relacionado con la misma temática investigada, refuercen estos, o no, los fundamentos, principios o postulados de la astrología tradicional. Estos ciclos planetarios activos nos indican la estrecha relación que mantienen en el espacio-tiempo con fenómenos o eventos histórico-sociales análogos, ya que se repiten de manera exponencial cuando se producen acontecimientos o hechos de características similares.

  2. En cada uno de los gráficos del Sistema Solar (gráfico natal) expuestos para un determinado período a analizar, doy un margen de tolerancia a los aspectos mínimo; siempre con un orbe inferior a 2º de arco, con el propósito de percibir los ciclos planetarios activos en ese momento. Con ello, se evita "adulterar" las "señales" o “guiños” que nos transmiten los planetas con sus correspondientes distancias angulares o aspectos, ya que con orbes mucho más amplios podemos distorsionar la realidad cíclica imperante en esa franja de tiempo, simulando o alterando con ello la validez objetiva de un serio y riguroso estudio o análisis astrológico. Al ampliar demasiado los orbes o márgenes de tolerancia de un aspecto, el resultado final puede quedar mermado o debilitado mediante el método científico de la temática investigada.

  3. En los casos donde se desconoce la hora del suceso o evento a investigar, omito tanto la posición de la Luna como la del Ascendente y del Medio Cielo para evitar distorsionar los resultados astrológicos. Como todos sabemos, los tres elementos ya mencionados, debido a su rápido movimiento diario, desarrollan un sinfín de aspectos en sus respectivos recorridos con el resto de los planetas. Al desconocer la hora exacta en que ocurrieron los hechos o acontecimientos objeto de estudio, no es posible determinar con precisión cuáles son los aspectos involucrados realmente.

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